lunes, 30 de noviembre de 2015

Visita al reloj del Espolón por 3º E

Como ya sabéis, tenemos alumnas de prácticas por Infantil. Patricia, que está con nosotros en clase, nos comentó que su padre es el encargado del reloj del espolón. Y que podíamos ir a visitarlo. No nos lo pensamos dos veces y le dijimos que sí.


Y esta tarde, hemos ido dando un paseo hasta allí. El tiempo acompañaba.

El reloj del Espolón de Logroño, es un reloj mecánico en el que sus campanas tocan el estribillo: Ya se van los pastores / a la Extremadura / ya se queda la sierra / triste y oscura ...



Y a las 12 de la mañana se escucha su estruendosa sirena. Este reloj es un recuerdo de otros tiempos, de otra forma de vivir.





Hemos subido en el ascensor hasta el 5º piso. Ya eso, ha sido una aventura jejeje. Una vez arriba, en la terraza, José Luis les ha pedido cerrar los ojos para transportarlos a otro tiempo. Y después, han entrado en la sala donde está la maquinaria.



Les ha explicado que se cree que un Papa fue el que inventó el reloj. Antes eran solares, luego mecánicos, con pilas... y que esa máquina, que se cambió hace unos años, tiene tres partes. La primera, la central, es el corazón del reloj que no deja que se pare. La segunda, marca los cuartos y la tercera, las horas.



Nos ha hecho una demostración de todo. De las pesas que suben y bajan para que funcione el reloj, hemos oído la melodía que todo el mundo conoce, la sirena, que sonaba muy fuerte, los cuartos, horas... nuestros peques han visto y oído todos los sonidos.




También hemos subido a lo más alto, donde se encuentran las siete campanas que repican en el reloj. Nos ha hecho una demostración de cómo suena cada una. Les ha encantado. 




Y por último, todos hemos firmado en el libro de visitas. Lo hemos pasado genial y hemos disfrutado mucho de esta visita en el reloj del Espolón.



Damos las gracias a José Luis por su paciencia, por explicarnos tan bien la historia del reloj y por mostrarnos todos los sonidos.




Ahora cada vez que un alumno pase por el Espolón, seguro que se fija en el reloj y se acuerda de la visita.




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