Esta tarde hemos realizado un exquisito taller, un reno con golosinas.
Cómo olía la clase a chocolate caliente y qué difícil ha sido que no se comieran los lacasitos y los jamones, antes de terminarlo.
Con mucha paciencia han ido poniendo los ojitos, la nariz, las orejas y por fin ¡ha llegado la hora de saborearlo!
Hemos tenido una visita inesperada, los alumnos de Ángel nos han amenizado con un precioso villancico, tocándolo con la flauta.
Muchas gracias a las mamás por su originalidad, a Bea por su ayuda y a los futuros músicos por su ilusión.
¡Hasta el próximo!
Estábais todos para comeros.un gran abrazo Paula y Lucía
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